Clank!

En Clank! los jugadores se convierten en astutos ladrones que se infiltran en la montaña de un dragón furioso para robar valiosos artefactos. Cada jugador construye su propio mazo de cartas durante la partida, adquiriendo habilidades, armas y movimientos estratégicos mientras explora las profundidades del calabozo. Cada paso en falso genera ruido —¡CLANK!— y atrae la atención del dragón, incrementando el riesgo de perderlo todo. Solo los más rápidos y sigilosos podrán escapar con su botín y reclamar la gloria.

El juego combina la mecánica de construcción de mazos con estrategia táctica: los jugadores utilizan cartas de habilidad para obtener nuevos mazos, espadas para combatir monstruos y botas para moverse por el tablero. Con cada turno y cada carta adquirida, el mazo de cada jugador evoluciona, ofreciendo decisiones únicas y una experiencia de juego diferente en cada partida. El objetivo es recuperar artefactos y acumular puntos para superar a tus oponentes y coronarte como el ladrón más grande del reino.